Esto no es un blog, es mucho más. Es la última bombona de oxígeno que me queda en ocasiones. Es cada centímetro de mi piel sintiendo la lluvia. Es un vacío aquí dentro que a veces araña provocándome vomitar las últimas mariposas que habitan en mí. Es el conjunto de monstruos que habitan bajo mi cama confesándome sus miedos. Es un polvo sucio y rápido. Es un jodido y precioso caos difícil de entender, así que no te pido que lo entiendas, pero sí que no te olvides de donde esta la salida.
martes, 6 de marzo de 2018
Necesito sentir que no estoy muerta
Por favor, mírame a los ojos y dime que no me quieres, que jamás estaré a tu altura, y no pares de mirarme a los ojos mientras me lo dices; necesito sentir algo, aunque sea dolor, necesito saber que no estoy muerta y que aún puedo sentir.
Frío, calor, miedo, dolor, necesito sentirme viva una última vez, pero no sé como lograrlo si no es contigo, es como intentar encender una vela sin fuego, sin calor...resulta absurdo.
Necesito recordar como era esto de vivir sin ti, necesito recordar como se hacía, necesito coger aire y volver a respirar, me estoy hundiendo y nadie se da cuenta.
Necesito creer que esto es cuestión de tiempo, que puedo ser feliz sin ti, que no te necesito.
Me dijiste "adiós" esa tarde a comienzos de Enero a las siete y media.
Han pasado las semanas desde entonces,
mi reloj sigue marcando las siete y media.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario