martes, 20 de marzo de 2018

Matemáticas de un cadaver


De todo aquello que fuimos, sólo quedan decimales y el pequeño resto que nadie tuvo en cuenta al comprobar la división; y es que tú, fuiste mi mayor error de cálculo, la incógnita que jamás sabré aislar. Nunca se me dieron de todo bien esto de los números, pero, siempre supe que redondear acababa trayendo problemas y que ese "tú y yo" nunca daría exacto.
Y es que todos los "Te quiero" tienen un demonio enjaulado, algunos se falsifican y otros se suicidan en bocas de hielo que desean arder a contracorriente.
Yo tengo la culpa, por romper esa promesa de no volver a ilusionarme, por creer que el resultado del problema sería bueno, aunque hubiéramos redondeado varias veces, y por centrarme más en las operaciones que íbamos realizando que en el contenido de estas.
Ayer me acosté en mi cama con los ojos llorosos, ya me había pasado otras veces, pero esta vez me sentía de verdad hundida; así que no vuelvas a decir eso de que tú no has matado a nadie, porque esa noche me mataste a mí.
Debería ser valiente y admitir que todavía juego a ver quien me quiere esta noche a sabiendas de que no habrá forma de que vuelvas a ser tú. Debería saber ya que siempre tendré que redondear por alguna parte y, por tanto, nunca obtendré ese resultado exacto que siempre quisimos lograr.
Hace unos minutos vinieron los fantasmas de los recuerdos a por mi cadáver, les parecía extraño que siguiera teniendo los labios tan rojos como el carmín, luego observaron mi interior; descosido, roto, nublado...y me susurraron muy bajito al oído:
Resultado de imagen para chica con dolor amoroso                                                                                                                                                                                       - Bienvenida. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario