jueves, 5 de julio de 2018

La verdadera definición de belleza.


No es ni una altura determinada, ni una tonalidad de piel, ni una talla, ni mucho menos un peso concreto, la sociedad nos intenta hacer creer lo contrario, pero la belleza va mucho más allá que una cifra y es muy triste ver como muchos de vosotros todavía no sois conscientes de ello.
La belleza puede manifestarse de mil maneras diferentes, puede darse gracias a las pequeñas arrugas cuando sonríes, puede darse en un rostro lleno de pecas y que, tal vez y por culpa de la sociedad acomplejan a esa persona, también puede darse en una espalda llena de lunares que simboliza la ruta de un tesoro oculto, una forma determinada de mirar el mundo o las ojeras de alguien recién levantado por no haber dormido lo suficiente, pero, también puede darse mediante distintos comportamientos.
La manera en que alguien transmite sus ideas con ilusión, la manera en que alguien se ríe hasta acabar llorando, una manera de caminar sin nadie bajo la lluvia o la forma en que alguien baila al ritmo de la música antes de irse puede generar muchísima belleza. Mira, yo tal vez sea demasiado poética, pero, me gusta darme cuenta de esa especie de belleza difícil de percibir, pero que perdurará en el tiempo, porque el físico, queridas personitas y querida sociedad que tanta importancia nos hace creer que tiene durará tal y como te gusta unos años Y luego... ¿qué?.
¿Inseguridad y complejos por culpa de no llegar a unas expectativas que nos han impuesto?.
Soy una persona super insegura, en parte por cuestiones físicas y otras personales, pero, todos debemos intentar darnos cuenta de lo que hoy me gustaría poder transmitir.
Lo que nos va a llenar de belleza no es un físico que probablemente nunca alcance esas expectativas que nos hacen creer que debemos lograr, lo que nos llena y nos llenará de belleza es distinto en cada persona y por eso me parece tan mágico.
La velocidad con la que enrojecen las mejillas cuando nos alaban por algo, la manera llena de ilusión en que alguien se expresa hablando, alguna manía que intentas esconder en momentos importantes, el sonido de tu risa en momentos inapropiados o cuando llevaba ya demasiado tiempo sin aparecer, la forma en que alguien camina o baila bajo la lluvia mientras el resto busca algún lugar con techo, la mirada de alguien o el instante en que se emociona, las pequeñas arrugas de un rostro que nos hacen creer que hay que esconder o un cuerpo lleno de lunares son los que generan la belleza en una persona.
No me quiero liar, lo único que quería decir hoy es que mañana hacer un experimento:
Apagar el móvil y no lo encendáis hasta el día siguiente, y ese día, tan sólo, disfrutar de las personas con las que estéis, observar bien a quien tenéis a vuestro lado y os aseguro que descubriréis esos comportamientos o pequeños rasgos físicos tan cargados de belleza, y lo podréis descubrir porque no tendréis la necesidad de capturar ese instante en una fotografía, vuestra única obligación será disfrutar de él.
Hacer la prueba, os aseguro que os estáis perdiendo mil cosas y un millón de maneras distintas de manifestaciones de belleza por intentar capturarlo todo en fotografías.
Por favor, no tengo nada en contra de la fotografía, es más, me parece una actividad y/o profesión muy artística, pero, hay veces en que lo único realmente necesario es palpar cerquita ese instante y que quede guardado en ti, de verdad, no hay necesidad de compartir todo todo con el mundo, os estáis perdiendo de todo por creer que es así.
Y, por último, no sois una altura, un peso, una tonalidad concreta de piel, sois personas y la belleza va mucho más que un par de números, que no os engañen.
Es hora de quererse mucho, muchísimo💙

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