miércoles, 18 de diciembre de 2019

Tan sólo eso necesito en mi 2020, 2021, 2022 y así hasta el último suspiro


Lo mejor de este año no han sido sucesos o cosas materiales, lo mejor de este año han sido personas; el resto ha venido sólo a partir de ellas.
Así que para 2020 quiero eso, que sigan estando ahí muchísimos años más, pues sé que el resto irá viniendo sólo.

La inspiración que te entra a las 2:15 de la madrugada tras un trabajo estresante


Hay personas tan jodídamente locas o felices que cogen el botiquín de primeros auxilios y lo lanzan por la ventana sabiendo que en algún momento lo van a necesitar y, por primera en toda su vida hacen cosas como cerrar puertas que no volverán a abrir, bailar con una venda en los ojos por un puente colgante, lanzarse al vacío sin saber si llevan un paracaídas en sus mochilas, cierran los ojos y creen tener más posibilidades de las que realmente tienen y de ahí el riesgo, y de ahí la aventura.
Algunos nos llamas suicidas, otros afirmar que hemos perdido la cordura, que nuestros pensamientos no son lógicos, que no hemos seguido un método científico.
Y no, nos hemos escapado del laboratorio, hemos dejado las hipótesis en un cajón y hemos salido ahí fuera a vivir la única vida que tenemos, tal vez, por eso ya no nos importe averiguar si contamos con un paracaídas a nuestras espaldas y, tal vez, es esta la única manera de vivir el amor; tener una venda en los ojos, lanzarnos al vacío y que en mitad de la caída un abrazo nos confirme que hemos elegido el camino que sentíamos que debíamos elegir, así que esa ya es razón más que suficiente para no pensar nunca que nos hayamos equivocado.
Buenas noches. 

jueves, 12 de diciembre de 2019

La Navidad conlleva siempre algo de introspección


La Navidad es una época preciosa, aunque, depende del momento vital en el que te encuentres puedes verla con toda la alegría y felicidad que te quepa en el pecho o con cierto aire de tristeza mezclada con grandes dosis de la alegría inicial, y sin que ello te impida seguir percibiendo la preciosidad que encuentras en el instante de caminar por cualquier calle de Madrid abarrotada de gente, ruido y, a través de los cascos, cualquier canción que ya hayas escuchado mil veces, pero, que aún así se siga adentrando en ti como si fuera ese calor que sientes al entrar en cualquier tienda de Callao o Gran Vía para escapar del frío.
Me gusta la Navidad, me gusta mucho, pero, me gusta la forma de vivirla y sentirla de forma interna porque, seamos sinceros, por fuera solo se trata de una técnica de Marketing para que el dinero que has conseguido ahorrar antes te lo gastes ahora, pero, por dentro la Navidad siempre tendrá cierto aire de pureza dentro de cada uno de nosotros, cierto encanto, cierta alegría y nostalgia entremezclada con cierta esperanza y grandes dosis de optimismo al mirar al futuro que no sabes en que momento han aparecido, pero, gracias por aparecer.
La Navidad es una manifestación de todos los tipos de amor manifestándose a la vez, pero, también es que te duela un poco más de lo normal llegar a casa y no contar con detalles como te ha ido el día, la Navidad es llenarse de abrazos en los que me quedaría a vivir, pero, también es recordar a las personas que están en todas partes menos aquí cuando deberían estar a centímetros de distancia, la Navidad es una reunión familiar donde siempre salen algunos temas espinosos, pero, también es sentirte como los protagonistas de Narnia con todas tus primas a tu vera.
Navidad es estrés por los exámenes que están a la vuelta de la esquina, ansiedad por el conjunto de trabajos que hay que entregar, pero, también son miradas llenas de confianza hacia ti que te dicen que todo va a ir bien.
Navidad es mirarse al espejo y recordar todo en lo que estás trabajando dentro de ti y en lo que deberás seguir trabajando, pero, también es la sonrisa de orgullo de la chica del espejo al haberse sentido hoy guapísima viendo partes de su cuerpo que hace tiempo intentaba esconder con miedo.
Navidad es miedo porque eres consciente de que mientras todos ríen y bailan, el reloj no ha cesado su tic-tac, pero, también es apreciar que en esa fugacidad reside su valor y llegas, por fin, a la conclusión de que prefieres mil veces más en un futuro decir: ¿Te acuerdas cuándo...? a decir ¿Te imaginas que hubiera...?.
Navidad es sentirte insegura al probar conjuntos para Nochevieja, pero, también es bailar hasta el amanecer sin inseguridad alguna en Nochevieja rodeada de personas que siempre han estado ahí.
Navidad es reconocer que hay lugares que fueron hogar y que nunca volverás a sentirlos del todo así, pero, también es descubrir todo lo que has evolucionado y con ello una nueva familia chiquitita y especial que hacen que se me llenen los ojos de lágrimas al escribir esto.
Navidad es miedo a no poder retroceder, miedo al 《ahora o nunca》,pero, también es: "Esta soy yo y me gusta mucho como soy".
Navidad es luces y magia, chocolate caliente, besos, mimos y abrazos, planes espontáneos que se vuelven inolvidables, reencuentros, las 00:00 y pedir varios deseos con todas tus fuerzas, risas, cenas en las cuales lo de menos es el sitio, nieve, frozen 2 y morirse de amor,mantita y peli extremadamente ñoña, pero, que las verías sin parar si por ti fuera, personas que te quieren, dejarte querer, ver nevar o llover y sentirte inspirada, que no falte Amaia de fondo, bailar con alegría y pisar los charcos recordando cuando nuestra mayor preocupación sólo era tropezar y acabar en el suelo.
Navidad es todo esto y mucho más, turrón Suchard, villancicos de fondo, mucha gente a tu alrededor, estudiar para los finales y prometer que lo darás todo, pero, también es cuidarse, mimarse a una misma, alejarse de todo, pedir un deseo a esa estrella fugaz que acaba de pasar y creer en la magia, yo creo, sí creo.
Y no dejar de soñar en ningún instante ni bajo cualquier circunstancia, pues ya lo dijo Peter Pan:
《Sólo quien sueña aprende a volar》, y yo no he hecho más que empezar.
¡¡Feliz Navidad!!

miércoles, 11 de diciembre de 2019

Empoderamiento


Hoy me ha ocurrido algo, desde fuera parecerá insignificante, pero, desde dentro lo he vivido como algo importante y valioso.
Hoy, después de varios meses en los que he sentido que todo iba a poder conmigo y sin ni siquiera querer hacerlo, me he vuelto a sentar delante del espejo que hay en la puerta del baño para observar como estaba todo aquí dentro; me sentía algo nerviosa ya que casi todas las veces anteriores que lo he hecho he acabado medio llorando por todos los complejos que tengo, por la montaña interminable de pensamientos y sentimientos de inferioridad respecto a la chica del espejo y, la verdad, no tenía mucha confianza en que esta vez fuera a ser distinto, pero lo ha sido.
Me senté en el suelo y empecé a observar los rasgo físicos más generales esperando esa sensación de sentirme demasiado pequeña o demasiado "poca cosa", pero, hoy ocurrió todo lo contrario.
Fui despacio observando cada parte de mi cuerpo, observándome respirar, y me gustó lo que sentí y lo que vi, me gustaron partes de mí las cuales siempre he escondido, y sonreí sin dejar de mirar por si todo se desvanecía, pero, pasaron los minutos y me seguía gustando fijarme en la chica del espejo a la que ya, como de costumbre, se le empezaban a llenar los ojos de lágrimas.
Ha sido algo parecido a descubrir un mundo nuevo, una ciudad entera debajo de las ruinas que se veían a distancia y, durante ese tiempo, me he sentido preciosa, es la primera vez que uso esta palabra para referirme a mí misma y me siento bien, pero, extraña al decírmela y no sentirme demasiado presuntuosa.
No sé cuanto tiempo habrá transcurrido mirándome en el espejo, pero, es la primera vez que lo disfruto con tanta intensidad y, a la vez, ha sido una manera preciosa de descubrir que me equivocaba al decir que no estaba consiguiendo nada aquí dentro, estoy consiguiendo muchísimas cosas que no siempre creí que pudiera lograr, me siento como si un niño pequeño no esperara encontrar nada debajo del árbol y de pronto, al entrar en el salón, lo haya visto abarrotado de regalos.
Hoy me siento realmente bien y, la verdad, me siento orgullosa de estar consiguiendo aquí dentro tantísimas cosas que no creía que fuera a conseguir, pero, lo estoy logrando, y no ha sido ni está siendo fácil ni placentero el proceso, siempre duele y asusta un poco querer saber el origen de pensamientos y sentimientos acerca de una misma, pero, a la vez sentía que era necesario hacer frente a muchas muchas cosas, es parecido a cuando tenías una herida la cual tapabas un tiempo esperando que mejorase por arte de magia y sólo se infectaba más, llegando un momento en el que dejabas de taparla y decidías desinfectarla para que no fuese a más.
Aún queda mucho que trabajar, mucho que hacer aquí dentro,

domingo, 8 de diciembre de 2019

A la estrella fugaz que acaba de pasar:


Que me sigas cuidando desde ahí arriba, que quienes nos hacen vibrar el corazón sigan muchísimos más años cerquita, que los miedos no crezcan más de lo que ya lo consiguen en momentos de oscuridad, que las inseguridades se vayan yendo dejando paso al amor propio que deberíamos sentir todos al vernos en el espejo, que nunca sea el último abrazo, que las miradas sigan proporcionando calor cuando haga frío y que nunca dudemos de que todo va a salir bien, porque, aunque no sé como será cada instante, todo va a salir bien.
Esto es lo que quiero por Navidad.